A casi 15 años de haber llegado a los mercados, el C3 de Citroën vivió un destape de adelanto vigoroso. Se trata de la nueva generación de este compacto de cinco puertas y que figura en los planes de Chile para 2017. La marca, además, lo mostrará oficialmente en el Salón de París que comenzará a fines de septiembre.
Los vanguardistas airbumps que hemos visto en el Cactus C4 –piezas plásticas en las puertas- dicen presente también en este modelo de casi cuatro metros de longitud.
Para Linda Jackson, CEO de la marca francesa, este auto “tiene todos los distintivos de la marca Citroën y todas las cualidades para dar a la marca un nuevo impulso. Un reto importante para nuestro éxito, que representa una de cada cinco ventas en Europa para Citroën. Un automóvil cómodo con verdadera personalidad, llega para atraer a nuevos clientes que buscan un auto moderno de carácter”.
El nuevo C3 apuesta por la audacia en el diseño, que para el fabricante galo representa “una morfología sorprendentemente única, cuyas características principales son una alta presencia, tren delantero carismático y curvas generosas, produciendo una poderosa postura llena de energía”. El contorno suave, la firma gráfica y los colores de moda hacen del Nuevo C3, según Citroën, un innegable marcador de tendencias.
Para los dos tonos exteriores hay una opción de tres colores de techo, además de opciones de color para los faros antiniebla, los espejos retrovisores, el pilar C trasero y los airbumps. En el interior, los clientes pueden elegir entre cuatro paquetes de estado de ánimo diferentes que abordan tres looks diferentes. Tan pronto como se entra en el interior, aseguran desde Citroën, se siente muy espacioso, una sensación reforzada por la tapicería y el tablero horizontal despejado.
En el centro de la consola veremos una pantalla táctil de 7,0 pulgadas por medio de la cual se opera la multimedia y otras funciones del vehículo como climatizador, la configuración de algunos sistemas y la cámara de retroceso. En enero, se supone, el sistema será compatible con Apple CarPlay, Android Auto y MirroLink.
En este anticipo, la casa gala destacó una cámara de vídeo colocada detrás del retrovisor central, la ConnectedCam tiene un ángulo de grabación de 120º, un sensor con resolución full HD (1920 x 1080 píxeles), una memoria interna de 16 GB y un sistema de geolocalización. Al oprimir un botón situado en la base del espejo central, el conductor puede tomar fotos de 2 MP y si lo mantiene pulsado puede grabar vídeos de hasta 20 segundos. Citroën asegura que esta cámara en caso de accidente memoriza automáticamente los 30 segundos previos al accidente y los 60 segundos posteriores.
Exteriormente, en la zaga se ha resaltado la anchura, con superficies lisas que pretenden proporcionar un telón de fondo ideal para las luces traseras en 3D. La protección inferior proporciona una buena dosis de seguridad todos los días. La placa C3 es diferente a la del modelo anterior: el 3 aparece en negro con un borde cromado, recordando los galones negro brillante con borde cromado utilizado por los modelos desde el Citroën C4 Cactus.
Las motorizaciones no ofrecen algo nuevo y se remiten a tres gasolineros —PureTech 68, PureTech 82 y PureTech 110— y dos diésel —BlueHDi 75 y BlueHDi 100—. El de gasolina de 110 CV y los dos petroleros cuentan con un sistema Start&Stop (el resto no). La caja de cambios es siempre manual, aunque unos meses después del inicio de la comercialización habrá disponible un cambio automático de convertidor de par y 6 velocidades (ETG6) que veremos en la versión PureTech 110.