La estética es uno de los ítems mejor logrados en el trabajo del S2, el mini SUV con que JAC amplía su oferta en este segmento estrella y que se suma al full size S5 y al SUV mediano S3, presentado el segundo semestre del año pasado. La carrocería naranja cobriza ayuda a destacar la presencia de las barras de techo (no tiene sunroof) y las zonas donde hubo esmeros en líneas vanguardistas como la parate bajo de la zaga, neblineros, espejos y las esquinas que juntan el lateral y la parte posterior. El ejercicio de contemplarlo estacionado desde unos 10 metros lleva a un comentario común: es atractivo (el uso de llantas aro 16 en toda la gama también juega en su favor).
Como probamos la versión que JAC denomina Luxury, la más equipada de las tres disponibles, tenemos asientos de una cuerina que da una sensación de espesor y calidad, con acertados pespuntes blancos y una línea del mismo color. La sujeción lateral de los asientos delanteros es muy buena y se debe a la voluminosa pestaña que abraza nuestra zona de la cintura. El maletero, a su vez, sobresale por su amplitud.
El volante multifunción forrado en cuero también es exclusivo de esta unidad de nuestro test. La pantalla touch con cámara de retroceso protagoniza la columan central y es muy intuitiva, de sencillo acceso y llama la atención al ofrecer digitalmente un dial de las radioemisoras antiguas.
El embrague es muy suave y los cambios de su caja manual de cinco marchas pasan con sedosidad, algo que debe destacarse ya que el origen chino, en general, ha sido lerdo en mejorar este aspecto en sus transmisiones manuales. Pero paso a paso lo consiguen y en este JAC S2, nada que decir.
El motor gasolinero de 1.5 propone 111 caballos, que en la ciudad se desenvuelven sin ahogos. Cuando nos enfrentamos a cuestas o ascensos echamos en falta algo de potencia y es ahí donde hay que ir conociendo sus ademanes: el auto responde pero hay que salir a buscar un empuje más brioso rebajando marchas y en altas revoluciones, 4.500 al menos. Estos lo volverá más gastador y ya no tendremos la promesa de casi 15 km/litro para un uso promedio.
En esas mismas trepadas notamos uno de los grandes aciertos del autos y que es el asistente de arranque en pendiente: estoy detenido, debo reiniciar la marcha, pongo primera, saco el pie del embrague y hay un par de segundos en los que el auto no se me va para atrás, lo cual será el deleite para aquellos conductores primerizos y otros no tanto que sufren en salidas de subterráneos o retomes en tacos con fuertes pendientes en ascenso.
En seguridad, en tanto, agrega mucho también el control de estabilidad y la solidez de sus sistema de frenado, que está confiada al ABS+EDB y pinzas rojas que muerden los discos delanteros y traseros. En la vía conocida como Piedra Roja, que une Chicureo y Lo Barnechea, entramos levemente pasados en velocidad a una curva algo cerrada y controlar el auto fue muy sencillo, momento en el que notamos la eficacia de sus frenos y los apoyos electrónicos que nos aseguraron una marcha impecable dentro de los carriles debidos.
Ficha técnica
Motor: 1.5 gasolinero DOHC (VVT).
Transmisión: Manual de 5 velocidades.
Potencia: 111 HP a 6.000 rpm.
Torque: 146 Nm entre 3.500 y 4.000 rpm.
Largo: 4.135 mm.
Despeje del suelo: 200 mm.
Neumáticos: 205/55 R16.
Estanque combustible: 42 litros.
Maletero: 450 litros.
Precio (versión test): $7.990.000.
