Honda lanzó en Chile la tercera generación de sus modelos de cilindrada media CB500F y CBR500R, una naked y una deporiva que llegan a complementar la gama 500 “twin”, integrada también por la CB500X.
El fabricante japonés destacó la evolución en el equipamiento, las modificaciones mecánicas –que le han otorgado 4% adicional de potencia- y el diseño más atractivo, además de la relación calidad-precio de ambas variedades.
La actualización contempló cambios en el motor, que permiten aumentar la aceleración y recuperación. Otros cambios incluyeron una nueva suspensión trasera, embrague asistido, iluminación completa con LED, instrumentación con nuevas indicaciones, y un nuevo escape de doble salida, agregó la marca.
El modelo 2019 de la CB500F cuenta con un motor bicilíndirico en paralelo de ocho válvulas, 471 cc y refrigeración líquida, que desarrolla una potencia máxima de 47 hp y un par de 43 Nm entre las 3.000 y 7.000rpm.
“El árbol de levas y la válvula de escape modificados han incrementado el torque a regímenes medio y bajo, para conseguir una aceleración mayor. El motor ahora incorpora, además, un embrague asistido/antibloqueo”, destacó Honda.
De marcado estilo naked, la CB500F tiene hoy un carrocería que le aporta un look más musculoso, así como una inédita pantalla del cuadro de instrumentos LCD inversa, que incluye el indicador de marcha.
Según resaltó la firma japonesa, “el resto de su iluminación LED añade un toque premium a los acabados. Los protectores laterales se engarzan con el depósito y realzan totalmente la vista del motor, mientras que las tapas laterales y el asiento contribuyen a su look muscular y anguloso”.
Honda agregó que su posición de conducción acomoda a pilotos de cualquier talla. Con una altura del asiento de 785mm, tiene una longitud de 2.080 mm, un ancho de 790 mm y un alto de 1.060 mm, con una distancia libre al suelo de 145 mm.
Su depósito de gasolina tiene capacidad para 17,1 litros, incluida la reserva, lo cual se traduce en una autonomía de 480 kilómetros.
La horquilla delantera telescópica de 41 mm tiene 120 mm de recorrido, mientras que atrás exhibe un amortiguador monotubo con precarga en nueve posiciones, que sustituye al diseño de doble tubo del modelo anterior.
Con sistema antibloqueo de serie, la CB500F está equipada con un disco de freno delantero de 320 mm y diseño lobulado con pinza de dos pistones. Atrás, ostenta un disco de 240 mm y pinza de pistón simple.
Disponible en rojo, blanco y negro mate, su precio de lista alcanza los $ 5.490.000.
Estirpe deportiva
Manteniendo sus líneas rectas en forma de cuña y sus tapas inferiores extendidas, la CBR500R también parece más agresiva, según ha enfatizado la marca.
Sus nuevos instrumentos LCD incorporan un indicador de marcha engranada y otro de conducción eficiente, que está ajustado a 8.750 rpm por defecto, pero puede ajustarse en incrementos de 250rpm, entre 5.000 y 8.750rpm, al igual que en el resto de la línea.
“La vista hacia delante desde el puesto de mando de la CBR500R es puramente deportiva. Los semimanillares se anclan ahora bajo la deportiva tija superior rediseñada y, como resultado, la posición de pilotaje se inclina 8° más hacia delante, mientras que el carenado también se ha colocado más abajo para ofrecer control total”, dijo Honda.
Con la misma suspensión que su hermana CB500F, cuenta con una distancia entre ejes de 1410 mm, ángulo de lanzamiento y avance fijados en 25,5° y 102mm, y un peso en orden de marcha de 192 kilos.
Sus dimensiones totales de longitud, anchura y altura son 2.080 mm, 750 mm y 1145mm, respectivamente, con una distancia libre al suelo de 130 mm. Otra de sus novedades es la caja de cambios de seis velocidades, que equipa un embrague asistido antirrebote, que facilita subir marchas y suaviza las reducciones fuertes, de acuerdo a lo informado por Honda.
Con opciones en blanco, negro y rojo, su valor es de $ 5.590.000.
