Su primer SUV híbrido para Chile anunció Ford con el estreno de la cuarta generación de su compacto familiar Escape.
La novedosa versión combina dos motores: uno a combustión interna de 2,5 litros y otro eléctrico con corriente alterna, que suman una potencia de 292 caballos de fuerza, además de un torque de 210 Nm a las 6.250 rpm.
Según explican en Ford, el propulsor eléctrico se encuentra siempre en funcionamiento a velocidades moderadas. Cuando la demanda de potencia es mayor, se activa el de gasolina de manera “automática e imperceptible”.
El Escape no necesita ser conectado a la corriente, sino que su sistema de frenado regenerativo convierte la energía cinética en eléctrica y recarga automáticamente la batería de alto voltaje que alimenta el motor eléctrico.
Por su parte, la edición convencional lleva debajo del capó un turbo Ecoboost 2,0, capaz de erogar 245 hp y 387 Nm a las 3.100 rpm, que está asociado a una caja automática de ocho velocidades y selector de cambios rotativo.
Entre los puntos altos de esta edición, se halla su sistema inteligente de tracción en las cuatro ruedas (AWD) de activación automática.
Ambas cuentan con cinco modos de manejo seleccionables, Normal, Eco, Sport, Resbaladizo y Nieve/Arena, que pueden controlarse a través de un botón ubicado debajo del control de marchas giratorio.
El Escape de cuarta generación incorpora freno de estacionamiento eléctrico con auto hold, que reemplaza a la palanca o pedal, y se activa cuando el conductor se detiene en el tráfico, va cuesta arriba o cuesta abajo, complementó en fabricante con sede en Dearborn.
El modelo fue rediseñado desde cero, destacó la firma estadounidense, partiendo por la parte delantera, cuya parrilla hexagonal y fascia inferior reflejan el toque de Ford Performance.
Entre otras novedades, presenta una línea de techo inclinada que culmina con un alerón. El uso de acero liviano de alta resistencia permitió que su peso disminuyera en aproximadamente 90 kilos.
“Cuando se mueven al máximo hacia adelante, la capacidad de carga llega a 1.062 litros, lo suficiente para llevar cuatro maletas grandes o una jaula para perros sin inconvenientes”, agregó el fabricante.
Salta a la vista en la cabina el techo panorámico eléctrico, que hoy es 20% más grande, así como los asientos deslizables de la segunda fila que pueden ajustarse 15,2 centímetros hacia adelante y hacia atrás.
Su sistema head-up display (HUD) proyecta información como velocidad, indicador de distancia, navegación, sistema de mantenimiento de carril y llamadas entrantes en una pantalla de 6 × 2,5 pulgadas.
La ficha técnica también ostenta un sistema de sonido B&O con 10 parlantes, subwoofer y 575 watts de potencia máxima, dos puertos USB de carga inteligente y carga inalámbrica. Suma el sistema SYNC 3, con pantalla táctil flotante de ocho pulgadas capacitiva y Sync Applink vía Bluetooth para dispositivos de Apple.
El sistema Ford Co‑Pilot 360 incluye luces altas automáticas; sistema de información de punto ciego con alerta de tráfico cruzado; sistema de mantenimiento de carril; asistencia de precolisión con frenado automático de emergencia y detección de peatones, así como cámara de visión trasera.
Adicionalmente, añade control crucero adaptativo con stop-and-go, sistema de navegación con pantalla táctil activado por voz, lane centering, dirección evasiva asistida y frenado poscolisión, detalló Ford.
Disponible en blanco metálico, verde persa, azul velocidad, azul metálico, oro del desierto, magnético, negro profundo y plata, la versión convencional del Ford Escape 2021 se comercializa en $26.290.000, mientras que la híbrida tiene un costo de $29.990.000.