Tras recibir 11 denuncias por incendios, las autoridades federales de Estados Unidos tienen bajo la lupa a cerca de 1,9 unidades del Toyota RAV4.
El problema tendría su origen en la zona izquierda del compartimiento del motor del SUV compacto, específicamente en un terminal de la batería, que puede provocar un cortocircuito.
Según los afectados, ha causado también que el vehículo se quede sin alimentación eléctrica y el bloqueo del motor en modelos comercializados entre 2013 y 2018.
La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) detalló que la mayoría de los propietarios reportó que las llamas se produjeron mientras conducían.
Sin embargo, cuatro de los denunciantes aseguraron que el incendio comenzó cuando el motor se encontraba apagado, informó Autoblog citando a Associated Press (AP).
A diferencia de otros casos, no se trataría de un defecto de fábrica, sino que por efecto de la incorrecta instalación de la batería o reparaciones tras colisiones frontales.
Pese a la influencia de terceros, la recurrencia del fuego es mayor que en otros vehículos similares, señalaron desde la NHTSA.
El objetivo de la investigación es “comprender mejor los factores causantes y la frecuencia de los incendios”, agregaron desde la agencia dependiente de la Secretaría de Transportes (DOT).
La NHTSA no ha reportado accidentes viales ni heridos vinculados a esta situación, agregó Consumer Reports. Por tal razón, no ha emitido una alerta para el retiro de las unidades presuntamente defectuosas, aunque no se descarta un recall en el futuro.
“Toyota es consciente de que la NHTSA ha abierto esta investigación y estamos cooperando con ella”, dijo un portavoz de Toyota que Reuters identificó como Ed Hellwig.
El fabricante japonés evitó referirse a la necesidad de estacionar al aire libre los vehículos en investigación, una sugerencia que al cierre de esta nota estaba bajo el análisis de la oficina federal.
La misma fuente noticiosa señaló que una unidad híbrida del RAV4 se incendió en Lyons, Colorado, luego de que su propietario divisara una luz de advertencia encendiéndose en el tablero y humo blanco desde el capó mientras conducía a 80 kilómetros (50 millas) por hora.
Mientras la investigación esté en curso, Consumer Reports sugirió informar sobre cualquier sospecha a la NHTSA y evitar manipular la fuente de poder.
“Los automóviles son cada vez más complejos, con sensibilidades clave relacionadas a la instalación de la batería. A menos que tenga conocimientos sobre la manera correcta de instalar una batería en su vehículo y sepa el tamaño exacto, es mejor que un profesional efectúe el reemplazo. La mayoría de los distribuidores, desde las tiendas locales de repuestos para automóviles hasta los concesionarios, lo hacen sin cargo”, señaló la revista.
El RAV4 no solo es la variante más vendida de Toyota en Estados Unidos, sino que también el modelo más exitoso del mercado tras las camionetas de tamaño completo Ford F-150, Ram 1500 y Chevrolet Silverado.