Un “tesoro de datos” podría almacenar la grabadora de datos del Genesis GV80 en el que volcó Tiger Woods mientras conducía por las calles de Los Ángeles.
El vehículo estaba equipado con una de las más nuevas versiones de las “cajas negras” creadas por la marca de lujo de Hyundai, tal como si se tratara de un avión, señaló un artículo de AP que reprodujeron medios como Chicago Tribune.
La investigación determinó que el deportista alcanzó máximas de entre 84 y 87 millas (135-140 kilómetros) por hora, casi el doble del límite permitido en Hawthorne Boulevard, de Rolling Hills Estates, establecido en 45 mph (72 km/h).
“Woods sobrepasó su carril, luego una señal de tráfico, y luego se fue a la acera oeste, antes de chocar con un árbol a 71 pies (22 metros) de la vía”, detalló un reporte del periódico Los Angeles Times.
El Departamento del Sheriff de Los Ángeles (LASD) informó que Woods aceleró y nunca aplicó el freno durante el incidente, tal vez por error, informó Reuters.
“Creemos que entró en pánico o tuvo alguna repentina interrupción mientras conducía, y que su reacción inicial fue de pisar el freno, pero pisó el acelerador”, dijo el capitán James Powers.
En su artículo, Richard Winton se pregunta por qué la estrella del golf no fue requerido por la policía. “Es una colisión de tráfico en solitario. No vamos a emitir una citación por una infracción que no esté en presencia de un oficial de paz. Eso se aplicaría a todo el mundo”, complementó el alguacil Alex Villanueva, quien descartó que el deportista haya recibido un trato especial.
Qué esconde la “caja negra”
Si bien la legislación de Estados Unidos no exige su presencia, sí obliga a los fabricantes a que estos dispositivos “almacenen datos de 15 aspectos, incluida la velocidad antes del impacto y si se presionó el freno o el acelerador”.
Por lo mismo, se cree que el análisis de la unidad de control del SUV ayude a definir las causas del accidente vial que le causó múltiples fracturas en la tibia y el peroné derechos al golfista más célebre de la historia.
Generalmente ubicadas debajo del tablero o los asientos, las computadoras guardan la información que recopilan de los sensores del automóvil.
Entre los detalles que almacena la computadora, se halla la velocidad a la que iba el conductor hasta cinco segundos antes del impacto.
Otro dato interesante que puede ayudar a dilucidar las caudas del accidente de Tiger Woods es saber si se presionó (y cómo) alguno de los pedales.
Aunque es menos factible, dado que los carros modernos equipan alertas, también es factible que el deportista haya conducido sin el cinturón de seguridad.
Las pesquisas también deberían ser capaces de establecer será si las bolsas de aire se inflaron y cuánto tiempo tomaron en desplegarse.
“Las versiones más recientes de las cajas pueden registrar fuerzas laterales, gracias a giroscopios. Miden así la rapidez con la que se volcó un vehículo o si operaron los frenos antibloqueo o los dispositivos de control de la estabilidad”, añadió AP.
Datos en tiempo real
Estrenado a mediados de los 90, el vigente protocolo OBD II permite conectarse física o inalámbricamente con el cerebro de los vehículos.
“Leer los datos en tiempo real permiten ver el comportamiento de sensores del vehículo, cambiar y retransmitir entradas de datos mientras el motor está funcionando”, explica Bosch.
Según el proveedor de partes y piezas, “la información en tiempo real ayuda a identificar los componentes con problemas y así obtener un diagnóstico más rápido y preciso”.
El Genesis GV80 fue el primer SUV del fabricante surcoreano. Su valor en Estados Unidos parte en los 48.900 dólares para la versión de entrada 2.5T I4 RWD, piso que se incrementa a 59,150 dólares para la tope de gama 3.5T V6 AWD.
