El emotivo desborde del piloto favorito que marcó la previa del TOTAL TP Race

El emotivo desborde del piloto favorito que marcó la previa del TOTAL TP Race

A Patricio Naranjo, el gran vencedor del TOTAL TP Race by Dunlop en la fecha doble de finales de septiembre en La Serena, se le juntó un revoltijo de sensaciones entre mucho trabajo con el auto, emociones personales, golpes deportivos y tristes evocaciones de un amigo que partió hace poco. Entonces esa victoria que lo puso en las puertas del título de campeón de la temporada 2017, se grabó no sólo con la disciplina deportiva del equipo Melhuish, sino que también esa fibra incluso íntima que lo ha zarandeado entre el éxtasis del triunfo y la amargura de lo que no fue.

“Ha sido un año tremendamente difícil, pero esas dificultades son las que nos fueron fortaleciendo. En un momento miramos al equipo entero y dijimos este año tiene que ser nuestro. Fue así como cada integrante, cada mecánico, cada ingeniero, cada piloto se fue convenciendo y dándolo todo para poner a los tres autos en punta”, le contó a Altorque, entre los abrazos largos y sentidos bajo el sol de la Región de Coquimbo.

El repaso del año, con carreras celebradas y que luego por no cumplimiento de reglajes, tiene un tinte que deambula entre la algarabía, la revancha y el escozor. “Al principio era golpe tras golpe. Ganábamos, luego venía el tema de que no se cumplió tal o cual cosa, y para atrás, después ganábamos otra vez, pero siempre con los dientes apretados. Luego llegó la fecha linda y doble de Huachalalume en La Serena, donde todo ese esfuerzo se vio reflejado, pero también donde cada integrante del equipo miró hacia atrás, con las alegrías y los sinsabores, hasta llegar a las puertas del campeonato y eso se siente muy rico”, relata el piloto que está a centímetros de atrapar la corona este domingo 22 de octubre en la fecha final de Codegua (desde las 10.00).

En Huachalalume, cuando faltaban algunos giros para coronar la jornada más brillante del equipo, con sus tres autos ganadores y el de Naranjo casi rozando la copa anticipadamente, se vivieron ribetes bien especiales. “Sí, se dio un tema íntimo, nos empezamos a hablar por radio cuatro o cinco vueltas antes de que terminara la carrera, el equipo estaba muy emocionado, porque hay un trabajo invisible y decisivo del equipo. Nosotros sólo somos pilotos que mantenemos el auto en la pista tratando de llevarlo al máximo de rendimiento, pero al final del día la verdadera obra de ingeniería la tiene mi hermano, la tiene Giancarlo Battaglia, Pato Navarrete, Pato Romero, el señor del camión, el señor de la grúa, Rojitas que trae el motorhome y se preocupa de la parte electrónica, la gente de René Torres, Ricardo Rozas… hay un conjunto de cosas y también un amigo que me está mirando desde el cielo y que falleció hace unas semanas y que en las últimas vueltas lo sentía, te lo juro que sentía, y que me decía vamos que se puede, entonces uno se emociona, se emociona mucho”.

La programación del TOTAL TP Race by Dunlop se cruzó en el camino de un tema íntimo que Patricio Naranjo no se guardó: “Tengo dos mujeres, lo puedo decir públicamente, mi mujer me va a matar pero cuando sepa quién es la segunda se va a poner muy contenta, porque es mi hija Elena que justo está cumpliendo dos añitos. Bueno y mi señora también de cumpleaños, así que una alegría doble”, señaló el aplaudido piloto del 2017.

Antes de arrancar la jornada en el trazado de la Cuarta Región, la suspensión del Peugeot 208 de Naranjo tiró una luz de alerta. “Trajimos puesta a punto de suspensiones, que no nos acomodó, pero el viernes la ajustamos tuvimos que variar la geometría completa, estuvimos hasta muy tarde, pero ya el sábado hicimos una pole y todo fue mejor, hubo un trabajo tremendo del equipo, y ya en la pista que Fernando (Melhuish) y mi hermano que me cuidaron la espalda en todo momento”, explicó.